miércoles, 11 de marzo de 2009

FRANK BAEZ, POSTALES, TEXTOS DE CARTON



POSTALES, BREVE GUIA DE UN TURISMO TRISTE
(A propósito de la puesta en circulación del libro Postales de Frank Báez)

Por Felipe Granados.


Recuerdo que de mi viaje por algunos países de la geografía latino americana, saqué muy pocas cosas en limpio. En mi haber cuento que la gente de las calles no se parece en nada a la de las Vallas publicitarias, esa gente que llamaríamos de éxito, esa gente que sonríe a la cámara muerta con una risa ídem, gente que me invita a comprar de todo, desde un carro hasta viagra, gente que parece no haber tenido nunca que esperar más de un minuto por un médico, gente bien.

Esa Gente que no soy yo.

Afuera en la acera, un piedrero, una señora de vida clandestina, un perro que duerme bajo el sol terrible del medio día salvadoreño, gente con menos dientes que los modelos de la tele, gente con un trabajo pobre o sin él, gente de autobús y seguridad social, gente como nosotros, soñando, en vano, que si sueñan fuerte el sueño se cumple.

¿Qué tienen estas postales que se alejan del color local?

¿Por qué no vemos fotos de chiquillos sonrientes alimentando a las palomas de la plaza?

¿Es que hay una sola postal aquí con atardecer de playa y pareja de la mano, en fatal cliché romántico de balada sesentera?

Ni una sola de las fotos muestra rostros felices, pienso en Anne Sexton muriendo en la atmósfera enrarecida de una cochera, pienso en la rubia que escribía sobre los espejos de los moteles, pienso en esa tía que despertó a su muerte en una tumba ajena, pienso en Frank Báez haciendo este inventario cargado de sentido.

Pienso en lo que significa el miedo.

Pienso que últimamente hasta me duele la alegría, o me da vergüenza sentirme feliz, cuando alguien sufre, llora, desespera y huye de todos los ojos, pero sobre todo de los míos. ¿Qué hago? ¿Escribir poemas desgarradores que no resuelven nada? ¿Qué hago, Frank? ¿Le recito al viento de mi barrio frases que no le dicen nada a nadie? ¿Hago la casa?, es decir, ¿hago el poema para que habite este fantasma que construimos juntos?

Bien dice un verso que todo aquello que no es útero es intemperie, Frank, yo lo aprendí mientras caminaba sobre la calle Guerrero en la noche ajena de Tijuana. Noche en que se extraña a una mujer con nombre y apellido.

Intemperie es todo lo que no arrulla.

Pero volviendo a tus postales, no está el tucán ni otras bestias ideales para la publicidad de nuestros paraísos del trópico, no está el artesano que cambia, a la inversa de hace cinco siglos, trozos de vidrio por euros, si esta la sicario alfabetizadora de la letra con sangre entra, sí está la mesera cubana tetona, sí está un vagón del metro y el tono amargo de las bolitas en las tómbolas de un bingo.

Hay libros que los lees y te invitan a hacer tu propia versión, hay libros que los abrís en cualquier página y te obligan a leerte para adentro.

Hay otros, como estas Postales, con los que solo se puede hacer un reverencial silencio, un silencio solidario, un silencio del que mira a un amigo llorar o morirse.

Postales que se envían desde la patria siempre triste del que está solo.

Felipe Granados

San José, Costa Rica.

Mayo - 2008


POSTALES

1
A tía Milagros que la enterraron en una tumba ajena del cementerio Cristo Redentor y que al día siguiente la desenterraron para sepultarla en el nicho que le correspondía

2
Al papá de Omar que caminó hacia San Cristóbal y se pegó un balazo antes de llegar

3
A Tomás que sufrió un derrame cerebral esperando un cliente en el aeropuerto

4
A Rondón que lo dejó su mujer y se deprimió tanto que tuvo que hacerse otro hoyo en la correa para que los pantalones no se le cayeran

5 Al poeta asesino Norman A. Porter que dormía con una pistola debajo de la almohada esperando al FBI

6 A Víctor Juan que viajó de Santiago de Cuba a Santo Domingo como seminarista y terminó en el Darío Contreras de enfermero, tomando luego un avión rumbo a México DF y del DF un bus a Ciudad Juárez desde donde caminó hasta los Estados Unidos y se declaró refugiado político

Autor: Frank Báez. Género: Poesía. Páginas: 40. Primera Edición Argentina: 50 ejemplares. Fecha: Marzo 2009. Precio: $15Los libros se pueden conseguir en Llanto de Mudo Libros, Av. Colón 355, local 61, Galería Cinerama, Córdoba.

Ruben Libros, Dean Funes 163, local 1, Paseo Santa Catalina, Córdoba.

El Baul Libros, Ayacucho 319, Córdoba

Librería Del ciclista, en Barcelona Bar
Caseros 45. Córdoba

La Fábrica Espacio Cultural, Caseros 988, Córdoba

Pachamama, Argañaraz 22, Villa Crespo, Buenos Aires

El Nautiluz, Piedras 1205, casi esquina San Juan, San Telmo, Buenos Aires

También mandamos los libros por correo a todo el mundo.